Mi yegua llegó casi de casualidad, yo llevaba unos años montando caballos de alquiler, primero en un picadero y después a un particular que los tenía en un pueblecito precioso de la Sierra.
Un supuesto amigo que la había comprado con algo más de dos años, siendo una potra y la había soltado en su propio pastizal. Entonces me fijé en ella y decidí comprarla, el me prometió que primero la domaría y después sería mia, pero como todo en esta vida, no fue tan sencillo ni tan fácil. La compré sí, pero lo de la doma lo dejamos aparte porque el bichillo estaba montado, como mucho, una docena de veces y encima con toda la sangre inglesa que corría por sus venas, podeis imaginar el papelón que se encontró una inexperta en doma, novata en todo, con una Potra de sangre más caliente que la lava de un volcán.
Pero eso es otra historia, Atila, a todos nos llega el momento de tener un caballo, si lo deseamos con toda el alma, ese ha sido mi sueño de toda una vida, y atento a lo que te dicen todos, lo dificil no es comprarlo, es mantenerlo, cuidarle, enseñarle, y procurar que se encuentre a gusto contigo.
Estoy con Arashi, con Dhor, que las dificultades vienen luego, con la doma, los gastos de veterinario, los herrajes, el comportamiento del caballo.. etc, etc. Pero voy a escribir una frase que dicen todos los Padres. "Tener hijos es tremendo, preocupante, un agobio, pero MERECE LA PENA",... Bien, tener un caballo es todo eso, pero la recompensa es tan estupenda que los sufrimientos quedan en meras anecdotas y por supuesto que aporta muchísima más felicidad que dolor.
"En cada momento de nuestras vidas tenemos un pie en el cuento de hadas y otro en el abismo".
Un supuesto amigo que la había comprado con algo más de dos años, siendo una potra y la había soltado en su propio pastizal. Entonces me fijé en ella y decidí comprarla, el me prometió que primero la domaría y después sería mia, pero como todo en esta vida, no fue tan sencillo ni tan fácil. La compré sí, pero lo de la doma lo dejamos aparte porque el bichillo estaba montado, como mucho, una docena de veces y encima con toda la sangre inglesa que corría por sus venas, podeis imaginar el papelón que se encontró una inexperta en doma, novata en todo, con una Potra de sangre más caliente que la lava de un volcán.
Pero eso es otra historia, Atila, a todos nos llega el momento de tener un caballo, si lo deseamos con toda el alma, ese ha sido mi sueño de toda una vida, y atento a lo que te dicen todos, lo dificil no es comprarlo, es mantenerlo, cuidarle, enseñarle, y procurar que se encuentre a gusto contigo.
Estoy con Arashi, con Dhor, que las dificultades vienen luego, con la doma, los gastos de veterinario, los herrajes, el comportamiento del caballo.. etc, etc. Pero voy a escribir una frase que dicen todos los Padres. "Tener hijos es tremendo, preocupante, un agobio, pero MERECE LA PENA",... Bien, tener un caballo es todo eso, pero la recompensa es tan estupenda que los sufrimientos quedan en meras anecdotas y por supuesto que aporta muchísima más felicidad que dolor.
"En cada momento de nuestras vidas tenemos un pie en el cuento de hadas y otro en el abismo".