Descuelga el teléfono y llama a las hípicas, yeguadas y otros centros ecuestres que tengas en un radio razonable para ti. Especifica bien qué necesitas y luego busca a un profesional que te acompañe a ver los que te puedan encajar. Si te llevas bien con el profesor de la hípica, seguramente te pueda ayudar a hacer un cribado previo a partir de las fotos y vídeos que te vayan enviado.
Es importante que la persona que te acompaña sepa el nivel de equitación que tenéis tu hija y tú... Conozco a gente que se compró un caballazo a través de un profesional, pero le cogió miedo porque es demasiado sensible (o tiene demasiada clase) para su nivel, se llevó un buen susto y hace meses que no se sube.
En los campos donde tengo a la mia hay una chica que solo llevaba montando 1 año.
Se compró un potro hispanoárabe de 5 años, que mide 173 a la cruz, lesionado (le dijeron que el caballo valia 12.000 pero que por la lesión se lo dejaban en 2.000). También creemos que lo vendieron infiltrado para que la lesión pareciese menos de lo que era, porque lleva unos meses que casi no puede ni andar.
Encima, nos dimos cuenta de que tiene un corvejón 5cm más alto que el otro. En resumen, es un desastre precioso, porque guapo lo es un rato largo el bicho... Encima tiene mucho potencial, porque cuando no se notaba tanto la cojera lo cierto es que se mueve que es una pasada, remete corvejones que da miedo, y vimos un hermano propio de él mucho mas arabito de carácter y ufffff eso es un avión.
La chica lo compró sin nadie que la aconsejase y ahora tiene que hacerse cargo "del problema". Lo cierto es que no tiene el ojo entrenado y no podía discernir la gravedad de la cojera. Tampoco hizo examen pre-compra.
El caballo ha estado en 6 meses en 5 hípicas distintas, hasta llegar a la mía. Era un estresado de la vida, había olvidado como ser caballo, hubo que empezar a domarlo de 0, siempre aislado en cuadra. Se asustaba de todo y te arrollaba. Total, que la dueña le tiene pánico, a la minima que el caballo mueve una oreja la dueña ya se aparta o le da un toque con el ramal. No se atreve a subirse a no ser que otra persona se suba antes y lo deje " a punto", las pocas veces que se atreve a cepillarlo, otra persona tiene que sujetarle el caballo pq no sabe estar atado, y a la que se mueve ella se aparta rápido...
En resumen, repetir el consabido consejo de "a jinete nuevo caballo viejo" y hacer énfasis en ir a ver caballos con alguien de fiar que te pueda aconsejar y con el ojo entrenado para ver cojeras, caballos con carácter desaconsejable, etc y examen pre-compra siempre!