vaquera como negocio

pistacho

Miembro
25 Abril 2013
42
2
1
Hola, desde hace un tiempo se viene hablando por el foro y por otros canales de conversación además de entre aficionados. De que la doma vaquera esta perdiendo su pellizco.
Llevo un tiempo reflexionando sobre ello al igual que muchos de vosotros, seguro. Pensando he llegado a la conclusión de que vaquera se esta convirtiendo en negocio que cada día más. Me explico porque esto así escrito es una tontería como un castillo.
De un tiempo ha esta parte van apareciendo más y más aficionados a la vaquera. Sobre todos de sitios donde no estaba extendida esta tradición. Esto se ha traducido en una mayor demanda de jacas. Claro está, los nuevos aficionados, se han acercado en su gran mayoría por lo que ven en ferias y romerías. Traduciéndose esto en que solo conocen el lucimiento de la vaquera y no la verdad que en ella reside.
Al ver esto ha habido profesionales que no han querido perder el filón que esto supone. Como cualquier negocio hay que traer beneficio y cuanto mas mejor. En una fábrica de coches se metería un turno más y se pagaría menos a la gente. Aumentando así el beneficio por coche vendido, además de aumentar por mayor venta en si. En cuanto a caballos se refiere esto es más complicado. No se puede acelerar tanto el desarrollo de un potro, es un animal no un coche.
Al hacer esto se ven caballos falseados que no andan como deben, no domados fuera de pista, con posiciones y formas más propias de clásica que de vaquera…

Luego esta el tema de la competición. Al fin y al cabo aquí no hay publicidad como con las marcas de coches. La única forma para que se vea reflejada tu capacidad es compitiendo y apareciendo en revistas, foros, youtube… llegados a este punto ha habido profesionales que han apostado mas por atraer esos potenciales clientes, a base de espectacularidad (al fin y al cabo es lo que quieren llamar la atención) en vez de darles lo que es realmente la vaquera y no llegando a todos pues no pueden formar caballos en la demanda que se les pide.

Aquí va mi pregunta ¿Qué pensáis? ¿Cómo hemos llegado a esta situación?
Con esto no quiero decir que todo el nuevo aficionado, no le guste realmente la vaquera. Hay personas que siendo novatas sienten autentica devoción e intentan aprender lo que realmente es. En fin como todos nunca se sabe suficiente.

Disculpar por el tostón, agradezco correcciones. Por favor que nadie se ofenda.
Un saludo.
 
4804194.jpg

¡¡¡Qué pena que lleves tanta razón!!!
 
A ver no es lo que pretendo.

Lo que pretendo es que seamosos criticos.
Aquí mismo se ha hablado de jueces y de jinetes pero no de aficionados ni de organización.

Por parte de la organización algo más de transparencia. Que ha pasado como con la famosa reunión. Porque aparte de alguien que dejo un mensaje en un post que murió pronto. Al menos yo no se nada mas. ¿Que cuesta por parte de la federación, crear algo de unidad?
Con esto me refiero a crear uniformidad entre, jueces, jinetes y aficionados. Por ejemplo haciendo un par dede articulos anuales. En el que se deje claro y ayude a encarrilar esto. Que cuando se haga algo en favor de que la vaquera funcione ( como la reunion). Todos deberiamos poder acceder a esa informacion a posteriori.

Por parte de los aficionados tenemos ( creo yo) la obligación de formarnos y ser exigentes.
¿Como? Sencillo, conociendo lo que se pide en la pista. De nuevo si hay transparencia por parte de la federación la cosa se hace más facil.

Bueno creo que con 2 mensajes he disparado contra todo el mundo. Mejor me callo ya que el pan sube.

De nuevo, acepto criticas. Espero no se ofenda nadie.
Un saludo.
 
El caballo nunca ha sido negocio, siempre ha sido afición............Para ser un buen caballista, primero tener una gran afición.........algunos con suerte pueden vivir del caballo, trabajando mucho.......no conozco a nadie que se haya hecho rico, con los caballos.........ya se sabe el dicho, no hagas por profesión, lo que el rico hace por afición........
Un saludo.
 
Hemnos de partir que a la gente no le gusta formarse. Es cierto, a mucha gente lo único que les gusta es ver concursos y caballos movie´ndose y no s epreocupan por saber si eso es correcto o no. Ni mucho menos hablamos de leer un reglamento. Existen cada vez más aficionados preocupados por mejorar cada día, pero la mayoría lo hacen acudiendo a aquellos jinetes que les agradan porque ganan tal o cual concurso y no se cuestionan sus métodos pues si ganan será por algo. Lo lamo es que cuando no ganana tampoco o cuestionan porque es culpa de los jueces que no tienen criterio. Y ellos con su criterio sacado del que tienen los jueces, pues es el que hacía ganar a su estrella, creen que saben mejor que ellos lo que es la vaquera.

Volvemos al principio: hay que saberse el reglamento antes de hablar de una cosa u otra. Pero a la inmensa mayoría de los aficionados no les gusta leer, y un reglamento menos... mejor fiarse de este campeón o de aquel campeón. Aquí la culpa es de los aficionados borregos que no quieren saber más vaquera que la que predica un sólo jinete al que siguen.

Después está la posición de estos jinetes que tiene esa legión de seguidores. Saben domar, pero tienen que aumentar beneficios. Y para ello se presentan caballos falseados, que no están domados, pero que son muy espectaculares. Cada año uno nuevo, que por supuesto después se vende a un precio estratosférico a uno de los fans que tienen. O a Italia, que allí ahora compran lo que sea. Da igual que el caballo no use su dorso, ni que se agarre al hierro en cada parada, o que se salga de una pista negándose incluso a parar. Da medias vueltas muy lentas (retrocediendo) y mete mucho los corvejones (pero al lado de la masa y no debajo). Espectacular pero incorrecto y, sobre todo, inmensamente más fácil que si lo hubiese hecho bien y más vistoso: venta asegurada, y legión contenta. A este tren se suben los fabricantes de arreos: botas y zahones naranjas(horrorosas), monturas de fibra (con mala geometría)... Aparecen modas como riendas alemanas con serreta y bocado, ledering, estribos ingleses con montura vaquera, numeritos de la cabra...

Y los fans se tragan todo sin cuestionar nada, y siguen gastándose la pasta en imitar a esos jinetes tocados por una varita. Pero no por la de la doma, sino por la del marketing. Vended un caballo a esos jinetes y a los dos días lo habrán revendido por tres veces lo que pagaron. Da igual si el caballo está delgado (es alto en sangre), cojo (se ha dado un golpe en el van), o raquítico(tiene mucha clase. Eso sí, la cara tiene que ser pequeñita, para que entre a los ojos. Y la egión se lo tragará todo otra vez. Y si no, lo sacamos a alguna feria, con su montura de fibra y concha abultada brillante como el charol, colocada en mitad dle cuello yt con un pecho petral naranja, a juego con los zahones en mitad del pecho, y las botas con cremallera. Importante llevar marsellés aunque en la hora más fría se superen los 30 grados, y la cabeza hacia abajo. Eso sí, los pelos engominados y levantados por detrás. Las castañetas hechas aunque vaya con zahones y el hierro plateado (¿y el pavonado en negro tradicional nuestro?) y articulado (para favorcer la falsa puesta en mano). Antes de terminar la feria ha pegado el caballazo a uno de los fans.

Por eso hay que hacer varias cosas: montar de verdad, sin chismes raros, resuperar la tradición vaquera de campo, leer tratados de monta a la jineta españoles, leer tratados de equitación clásica reputados, mirar muchos jinetes con visión crítica de lo que hace cada uno, leer y estudiar el reglamento, mirar faenas vaqueras donde el que monta lo hace de sol a sol y con caballos rusticos. En definitiva hacerse una opinión en base a muchas y variadas fuentes e imprimir personalidad propia a lo que se hace sin basarnos en lo que dice o no dice un juez, que mñana puede haber cambiado d eopinión o que no tiene uniformidad con el que está a su lado juzgando.

Y vamos a dejarnos de modas. UNa vez un famoso diseñador dijo sobre las modas: son algo tan feo, que cambian contínuamente.
 
Sila, creo que nadie habría expresado mejor el estado actual de la Vaquera, se nota que sigues puntualmente las temporadas de concursos.

Pero no quiero dejar pasar tu extraordinaria reflexión para centrarme en los menores. Cuanto daño se les está haciendo a estos chavales y chavalas que se inician o que llevan ya una dilatada trayectoria en este apasionante mundo. Yo que me muevo en él, me da pena y miedo escuchar a unos niños esos comentarios gradilocuentes, esas aseveraciones, influenciados por estos "innovadores" de la Vaquera, a los cuales tratan de imitar hasta en los mas mínimos detalles, tirando por tierra a los demás jinetes que no se pliegan a los "triunfadores". Si ellos ganan consursos, nosotros los imitamos y también ganamos. Esto es lo que hay en la actualidad.

Está en manos de las federaciones y jueces revertir esta situación. No creo que sea imposible, sí dificil, pero no imposible.
Mientras llega, trataremos de sobrevivir con ilusión y esfuerzo. Creo que somos mayoría. Lo conseguiremos.
 
Pues bien; debemos partir de la base de que no es nada malo que dentro de una afición o un deporte se fomente una industria ( desgraciadamente lo dice alguien que lleva varios años gastando dinero en potenciar dicha industria). Si hay aficionados que quieren destinar parte de sus ingresos a tener un caballo no es malo, por que de este modo trabajaran más herradores, guarnicioneros, sastres, jinetes , ganaderos,cerealistas, agricultores..un largo etc, y eso no es malo. Tampoco es malo que en las competiciones un comité organizador gane dinero, que los concursos y exhibiciones sean un espectáculo, que haya sponsor que publiciten sus productos, que los jueces (todos) puedan aspirar a jugar concursos sin que les cueste a ellos el dinero, que las localidades se den a conocer gracias a estos concursos y exhibiciones. Y es buenisimo que los hijos de los aficionados acudan a recibir clases, que los técnicos deportivos y profesores trabajen, que las cuadras y centros hípicos vayan a más, que nuestro país se conozca en el mundo entero por su doma vaquera...todo esto no es malo, sino bueno, por que se traduce en bienestar para los implicados.

Lo que no es bueno es que, como nos pasa, no estemos siendo conscientes de todo esto y sigamos haciendo concursos en patatales,no se cuide al espectador, ninguna empresa importante patrocine la doma vaquera, haya aficionados que sean acérrimos y partidistas, sin la suficiente cultura ecuestre como para tener criterio y ver lo bueno y respetar. Lo malo es que el mundo del caballo vaquero no desarrolla su potencial....se queda muy corto mientras el tren pasa y se desprobechan muchas oportunidades de crear una industria limpia, amplia y buena alrededor del caballo campero y la vaquera, que no es incompatible con mantener su esencia.
 
Hemnos de partir que a la gente no le gusta formarse. Es cierto, a mucha gente lo único que les gusta es ver concursos y caballos movie´ndose y no s epreocupan por saber si eso es correcto o no. Ni mucho menos hablamos de leer un reglamento. Existen cada vez más aficionados preocupados por mejorar cada día, pero la mayoría lo hacen acudiendo a aquellos jinetes que les agradan porque ganan tal o cual concurso y no se cuestionan sus métodos pues si ganan será por algo. Lo lamo es que cuando no ganana tampoco o cuestionan porque es culpa de los jueces que no tienen criterio. Y ellos con su criterio sacado del que tienen los jueces, pues es el que hacía ganar a su estrella, creen que saben mejor que ellos lo que es la vaquera.

Volvemos al principio: hay que saberse el reglamento antes de hablar de una cosa u otra. Pero a la inmensa mayoría de los aficionados no les gusta leer, y un reglamento menos... mejor fiarse de este campeón o de aquel campeón. Aquí la culpa es de los aficionados borregos que no quieren saber más vaquera que la que predica un sólo jinete al que siguen.

Después está la posición de estos jinetes que tiene esa legión de seguidores. Saben domar, pero tienen que aumentar beneficios. Y para ello se presentan caballos falseados, que no están domados, pero que son muy espectaculares. Cada año uno nuevo, que por supuesto después se vende a un precio estratosférico a uno de los fans que tienen. O a Italia, que allí ahora compran lo que sea. Da igual que el caballo no use su dorso, ni que se agarre al hierro en cada parada, o que se salga de una pista negándose incluso a parar. Da medias vueltas muy lentas (retrocediendo) y mete mucho los corvejones (pero al lado de la masa y no debajo). Espectacular pero incorrecto y, sobre todo, inmensamente más fácil que si lo hubiese hecho bien y más vistoso: venta asegurada, y legión contenta. A este tren se suben los fabricantes de arreos: botas y zahones naranjas(horrorosas), monturas de fibra (con mala geometría)... Aparecen modas como riendas alemanas con serreta y bocado, ledering, estribos ingleses con montura vaquera, numeritos de la cabra...

Y los fans se tragan todo sin cuestionar nada, y siguen gastándose la pasta en imitar a esos jinetes tocados por una varita. Pero no por la de la doma, sino por la del marketing. Vended un caballo a esos jinetes y a los dos días lo habrán revendido por tres veces lo que pagaron. Da igual si el caballo está delgado (es alto en sangre), cojo (se ha dado un golpe en el van), o raquítico(tiene mucha clase. Eso sí, la cara tiene que ser pequeñita, para que entre a los ojos. Y la egión se lo tragará todo otra vez. Y si no, lo sacamos a alguna feria, con su montura de fibra y concha abultada brillante como el charol, colocada en mitad dle cuello yt con un pecho petral naranja, a juego con los zahones en mitad del pecho, y las botas con cremallera. Importante llevar marsellés aunque en la hora más fría se superen los 30 grados, y la cabeza hacia abajo. Eso sí, los pelos engominados y levantados por detrás. Las castañetas hechas aunque vaya con zahones y el hierro plateado (¿y el pavonado en negro tradicional nuestro?) y articulado (para favorcer la falsa puesta en mano). Antes de terminar la feria ha pegado el caballazo a uno de los fans.

Por eso hay que hacer varias cosas: montar de verdad, sin chismes raros, resuperar la tradición vaquera de campo, leer tratados de monta a la jineta españoles, leer tratados de equitación clásica reputados, mirar muchos jinetes con visión crítica de lo que hace cada uno, leer y estudiar el reglamento, mirar faenas vaqueras donde el que monta lo hace de sol a sol y con caballos rusticos. En definitiva hacerse una opinión en base a muchas y variadas fuentes e imprimir personalidad propia a lo que se hace sin basarnos en lo que dice o no dice un juez, que mñana puede haber cambiado d eopinión o que no tiene uniformidad con el que está a su lado juzgando.

Y vamos a dejarnos de modas. UNa vez un famoso diseñador dijo sobre las modas: son algo tan feo, que cambian contínuamente.

¡Que razón llevas, Sila!..............................

Saludos,
 
Pues bien; debemos partir de la base de que no es nada malo que dentro de una afición o un deporte se fomente una industria ( desgraciadamente lo dice alguien que lleva varios años gastando dinero en potenciar dicha industria). Si hay aficionados que quieren destinar parte de sus ingresos a tener un caballo no es malo, por que de este modo trabajaran más herradores, guarnicioneros, sastres, jinetes , ganaderos,cerealistas, agricultores..un largo etc, y eso no es malo. Tampoco es malo que en las competiciones un comité organizador gane dinero, que los concursos y exhibiciones sean un espectáculo, que haya sponsor que publiciten sus productos, que los jueces (todos) puedan aspirar a jugar concursos sin que les cueste a ellos el dinero, que las localidades se den a conocer gracias a estos concursos y exhibiciones. Y es buenisimo que los hijos de los aficionados acudan a recibir clases, que los técnicos deportivos y profesores trabajen, que las cuadras y centros hípicos vayan a más, que nuestro país se conozca en el mundo entero por su doma vaquera...todo esto no es malo, sino bueno, por que se traduce en bienestar para los implicados.

Lo que no es bueno es que, como nos pasa, no estemos siendo conscientes de todo esto y sigamos haciendo concursos en patatales,no se cuide al espectador, ninguna empresa importante patrocine la doma vaquera, haya aficionados que sean acérrimos y partidistas, sin la suficiente cultura ecuestre como para tener criterio y ver lo bueno y respetar. Lo malo es que el mundo del caballo vaquero no desarrolla su potencial....se queda muy corto mientras el tren pasa y se desprobechan muchas oportunidades de crear una industria limpia, amplia y buena alrededor del caballo campero y la vaquera, que no es incompatible con mantener su esencia.

Si no se moviese dinero en la doma vaquera, directamente se moriría, y no solo esa disciplina o modalidad hipica, sino cualquier otra actividad cualesquiera que fuese. He leído que el caballo siempre fué afición y nunca negocio, y eso no es así. El caballo nunca fué en principio animal de compañía, como lo es un canario, sino una herramienta de trabajo, para agricultura, ganadería, carne, ejército, transporte de personas y mercancías, etc. Ahora, además de ser un negocio importante, es una afición de ocio. Hay que recordar que la palabra negocio significa la negación del ocio, o sea, la falta de actividad, y eso significa movimiento de dinero. Unos para vender y otros para comprar (caballos, productos para caballos, jinetes, cuadra, herradores, veterinarios, y un largo etcétera). Si todo eso no se moviese, se acababa.

Asunto muy distinto es el enfoque que se dé, cómo se organice, desarrolle y ejecute. Afortunadamente estoy viendo el desarrollo de otras disciplinas ecuestres complementarias a los simples concursos de DV, como concursos y exibiciones de doma de campo, de trabajo, que antes no existían. El futuro está en aportar ideas para que haya espectadores que acudan a las exibiciones, pasen un momento agradable, y aporten dinero para poder mantenerlo.

La doma vaquera no es sagrada (intocable), como dice la sevillana. Afortunadamente hay mucha afición e ilusión por aportar ideas que mantenga vivo lo vaqueroso

Saludos,

El mercado es el que dicta si algo está bien o nó y
 
Está claro que se puede hacer negocio con la Doma Vaquera, incluso me atrevería a decir que se debe de hacer negocio. Pero no el tipo de negocio que tan bien ha plasmado nuestro amigo Silas, sino un negocio de verdad, mostrando una doma de verdad para vender caballos domados de verdad.

Luego lo demás va implícito, todo el mundo querrá la montura que use tal o cual jinete, así con los zahones, arreos y demás accesorios, pero siempre manteniendo la tradición de una doma que es la nuestra. No deja de ser algo de lo que llaman "Marca España", si nosotros no defendemos lo nuestro quién lo va a defender? Los italianos que no lo conocen? Aprovechemos y vendamos bien lo nuestro...

Un saludo
 
Domar un caballo de verdad, nunca ha sido ni es rentable............primero el precio del potro, si es bueno vale dinero, después el tiempo que lo tienes que tener antes de empezar a domarlo.......después llevarlo a un domador competente, tenerlo en doma durante por lo menos dos años y medio o tres años........"que valga o que no te lo estropeen o se lesione"...............echarle las cuentas.........¿Donde esta el negocio?............
Hay gente que les ha estado haciendo el caldo gordo a los domadores durante años, ya que les han estado pagando, para que les domase un caballo y el domador ha estado utilizando el caballo para concursar, después cuando el caballo ya no servia se lo han dejado o si lo han vendido..........se han llevado su buena comisión............la verdad es que en los caballo de la vaquera no veo como el negocio, si mas como afición...........
Ahora en otras disciplinas hípicas, si que se han pagado caballos con seis ceros detrás de la primera cifra............pero en la vaquera desgraciadamente no.........
Saludos.
 
Hablemos de negocio en vaquera:

Jinete que compra un caballo bueno porque tiene muchos contactos. Lo doma en un año o dos para concursar. Y lo vende por cifras de 4 ceros..

Esto existe.

Jinete que tiene gente dando clases en su casa. A cambio les da caballos serreros con el que aprenden a domar con la condición de que los cuide el alumno. Cuanod está domado hay dos opciones: 1. se lo queda el alumno, 2. se vende con al menos 3 ceros detrás.

Esto también existe.

El problema estñá en esa doma de un año o dos escasos. Porque eso no es doma, pero así se rentabiliza.

Y si vemos el coste de un caballo en un año, vamos a tirar por arriba y poner 200 € al mes (que no es). 2.400€. Si se vende con 3 o 4 ceros detrás...
 
Lo siento Sila, sigo sin ver el negocio.........para vender el caballo en esos dineros, que no digo que no se hayan pagado por algunos.......tendrían que ser caballos bien domados por profesionales, que ya estén incluso entrando en pista, a no ser que el que los compre sea un pardillo............
sabemos que no todo el mundo es capaz de domar un caballo a la vaquera, por muy buen maestro que tengas........por lo menos a un nivel adecuado, para poder decir que el caballo esta puesto.........de hecho sabemos, que los domadores suelen tener gente que les monta los caballos, llamemosles alumnos........después de esos caballos que montan los alumnos o ayudantes como a mi me gusta llamarlos, escojen los que a ellos les gustan y les ven maneras, para prepararlos para concursar............
saludos.
 
Cefiro, ahora te dare yo un ejemplo, muy cercano a mí.

Un amigo vendio su caballo a un picadero por x dineros. Cuando se lo vendió ya lo habia estado afreciendo por ahí. Él doma sus propios caballos y más o menos lo tenia puesto.
A nadie le intereso o le parecio justo lo que el ofrecia y pedía.

Pues bien el del picadero lo vendió 4 dias después de que se lo comprase a mí amigo. Sin echarlele una sola monta.

Ahora llega lo rocambolesco de la historia.
Se lo vendio a un tio que ya lo había visto en casa de mi amigo. Por más dinero del que lo pudo comprar en un principio
 
Bueno, no me parece muy extraño, a veces la gente considera que las cosas valen más o menos dependiendo de su procedencia, y no de el objeto en sí, animal en este caso.
Quizás supone que le van a dar un servicio post venta, o cierta "garantía" o ayuda para un eventual problema, aunque sea por conservar su imagen. Y por ello prefiere pagar un poco más. Aunque puede que tú amigo también le ayudara en un momento dado, pero tira a lo que cree más seguro.
 
Hemnos de partir que a la gente no le gusta formarse. Es cierto, a mucha gente lo único que les gusta es ver concursos y caballos movie´ndose y no s epreocupan por saber si eso es correcto o no. Ni mucho menos hablamos de leer un reglamento. Existen cada vez más aficionados preocupados por mejorar cada día, pero la mayoría lo hacen acudiendo a aquellos jinetes que les agradan porque ganan tal o cual concurso y no se cuestionan sus métodos pues si ganan será por algo. Lo lamo es que cuando no ganana tampoco o cuestionan porque es culpa de los jueces que no tienen criterio. Y ellos con su criterio sacado del que tienen los jueces, pues es el que hacía ganar a su estrella, creen que saben mejor que ellos lo que es la vaquera.

Volvemos al principio: hay que saberse el reglamento antes de hablar de una cosa u otra. Pero a la inmensa mayoría de los aficionados no les gusta leer, y un reglamento menos... mejor fiarse de este campeón o de aquel campeón. Aquí la culpa es de los aficionados borregos que no quieren saber más vaquera que la que predica un sólo jinete al que siguen.

Después está la posición de estos jinetes que tiene esa legión de seguidores. Saben domar, pero tienen que aumentar beneficios. Y para ello se presentan caballos falseados, que no están domados, pero que son muy espectaculares. Cada año uno nuevo, que por supuesto después se vende a un precio estratosférico a uno de los fans que tienen. O a Italia, que allí ahora compran lo que sea. Da igual que el caballo no use su dorso, ni que se agarre al hierro en cada parada, o que se salga de una pista negándose incluso a parar. Da medias vueltas muy lentas (retrocediendo) y mete mucho los corvejones (pero al lado de la masa y no debajo). Espectacular pero incorrecto y, sobre todo, inmensamente más fácil que si lo hubiese hecho bien y más vistoso: venta asegurada, y legión contenta. A este tren se suben los fabricantes de arreos: botas y zahones naranjas(horrorosas), monturas de fibra (con mala geometría)... Aparecen modas como riendas alemanas con serreta y bocado, ledering, estribos ingleses con montura vaquera, numeritos de la cabra...

Y los fans se tragan todo sin cuestionar nada, y siguen gastándose la pasta en imitar a esos jinetes tocados por una varita. Pero no por la de la doma, sino por la del marketing. Vended un caballo a esos jinetes y a los dos días lo habrán revendido por tres veces lo que pagaron. Da igual si el caballo está delgado (es alto en sangre), cojo (se ha dado un golpe en el van), o raquítico(tiene mucha clase. Eso sí, la cara tiene que ser pequeñita, para que entre a los ojos. Y la egión se lo tragará todo otra vez. Y si no, lo sacamos a alguna feria, con su montura de fibra y concha abultada brillante como el charol, colocada en mitad dle cuello yt con un pecho petral naranja, a juego con los zahones en mitad del pecho, y las botas con cremallera. Importante llevar marsellés aunque en la hora más fría se superen los 30 grados, y la cabeza hacia abajo. Eso sí, los pelos engominados y levantados por detrás. Las castañetas hechas aunque vaya con zahones y el hierro plateado (¿y el pavonado en negro tradicional nuestro?) y articulado (para favorcer la falsa puesta en mano). Antes de terminar la feria ha pegado el caballazo a uno de los fans.

Por eso hay que hacer varias cosas: montar de verdad, sin chismes raros, resuperar la tradición vaquera de campo, leer tratados de monta a la jineta españoles, leer tratados de equitación clásica reputados, mirar muchos jinetes con visión crítica de lo que hace cada uno, leer y estudiar el reglamento, mirar faenas vaqueras donde el que monta lo hace de sol a sol y con caballos rusticos. En definitiva hacerse una opinión en base a muchas y variadas fuentes e imprimir personalidad propia a lo que se hace sin basarnos en lo que dice o no dice un juez, que mñana puede haber cambiado d eopinión o que no tiene uniformidad con el que está a su lado juzgando.

Y vamos a dejarnos de modas. UNa vez un famoso diseñador dijo sobre las modas: son algo tan feo, que cambian contínuamente.

Estoy totalmente de acuerdo contigo Sila, aunque hayamos tenido nuestras diferencias estoy seguro que eres un gran jinete vaquero y un mejor aficionado
Un saludo
 
Cefiro, hay caballos en pista que están falseados, y mucha gente los ve bien domados. Los pagan muy bien a pesar de que alguno incluso se agarre al hierro cuando le aprietan más de la cuenta. Pero es que hay gente que sabe vender lo que sea. Y hay mucho negocio en la vaquera hoy en día.
 
últimamente estoy algo descolgado, de la competición, no de la vaquera.........ayer estuve recogiendo vacas............procediendo de tal o cual domador, que ha sido campeón.....la gente ha pagado precios..........mas o menos altos............de muchas veces caballos en los que no eran capaces no de montarse...........recuerdo uno de mi pueblo, que mando domar una potra angloarabe y compro otra yegua domada a un jinete que ha sido varias veces campeón de España y Andalucía, este hombre, solo era capaz de montar las yeguas después de haberse bebido un par de whiskis .............gasto una cantidad ingente de dinero en caballos, incluso monto su propio picadero.........hasta que finalmente se arruino...........este no era el caso de caballos que no estaban puestos, ya que la yegua que compro, esta invatida en pista montada por el jinete que la domo...............es un tipo de aficionado, que gasta mucho dinero sin tener conocimientos de lo que esta haciendo, ni nivel para poder montar, un caballo puesto a la vaquera...........que a fin de cuentas no sabe que ha comprado............
Saludos.
 
.............es un tipo de aficionado, que gastamucho dinero sin tener conocimientos de lo que esta haciendo, ni nivel para poder montar, un caballo pu esto a la vaquera...........que a fin de cuentas ,no sabe que ha comprado............
Saludos.

Es que realmente, cuanta gente tiene la capacidad de montar un caballo puesto en vaquera a ese nivel?
Una cosa es lo que nos gusta, y otra muy distinta lo que podemos hacer, y eso, en el mundo del caballo, parece que muchos no lo acaban de entender, y piensan que aquí vale todo, y sobrevaloran mucho sus capacidades. Todo es muy fácil de hablar y sobre todo en la barra de un bar, pero la realidad es muy distinta.
Para dar patadas a un balón, sirven 4 dioses, pero para gobernar el país y montar a caballo vale toda españa?

Yo sólo conozco una persona capaz de llevar bien una yegua como esa y vive a 300 km de aquí. Y, ojito, que se tendría que adaptar ella... y cuesta.

Un saludo.
 
Última edición:
Se compra el caballo, no al jinete.

Creo que se está hablando de cosas distintas.
Una cosa es la inoperancia del que compra y otra el engaño del que vende.

Un caballo realmente puesto, siempre enseña a su jinete ( si este es un novato o no alcanza su nivel)
Solo es cuestion de tiempo y echarlerle ganas.

Un caballo falseao, no. Porque ni él sabe que hay que hacer realmente.
 
Regístrate ahora y pasa a formar parte de la mayor comunidad de aficionados a los caballos en español.

Cuéntanos tus experiencias, o planteanos tus preguntas. Entre todos intentaremos ayudarte.

¡Y lo mejor de todo es que es grátis!