Bueno,pues como dice el Evangelio,"Hay un tiempo para nacer y un tiempo para morir",y a Urcel y a mí ,nos llegó el dia de tener que separarnos.Esta mañana han venido unos soldados de la Guardia Real a buscarlo en un camión especial.
El dia amaneció gris y muy frio,con la nieve en las cumbres,como si quisiera acompañar con su tristeza la tristeza que me quedó a mí en el corazón.Ayer estuve toda la tarde cepillandolo para que estuviese bien bonito y despidendome de él.
Le expliqué que, como habia sido siempre un buen caballo,que como se habia hecho digno de todo el cariño del mundo,pues que la vida le habia premiado con la oportunidad de irse a una especie de Cielo que los caballos tenian en la Tierra,ya que no tenian Cielo de verdad.Y le conté que ese Cielo se llamaba la Guardia Real,y que estaba en un pueblo llamado Madrid,que era un poco mas grande que Palaciós.Que allí,ademas de disfrutar de todas las comodidades del mundo,habria otras personas que lo querrian tanto como yo,que se preocuparian de que siempre estuviese contento,de que nada turbara su sueño por la noche,que nunca le faltase la mejor comida y de que hiciese ejercicio todos los dias.Que habria personas que cepillarian a diario y que le rascarian en la cruz,que es lo que mas le gusta.
Mientras frotaba su lomo con la bruza,le contaba que le habia cabido en suerte el mayor honor a que podia aspirar un caballo,y que iba a servir a Su Majestad el Rey de España,y que seria la envidia de todos los caballos del mundo,pues la suerte no premia por igual a todos los caballos.
Urcel me miraba y me comprendia perfectamente.Le dije que alli conoceria a otros muchos caballos parecidos a él.Que le enseñarian y le entrenarian para tirar de carruajes,y que en las grandes ocasiones,desfilaria imponente y orgulloso por las calles de Madrid,y que podia estar seguro que yo estaria mirandole embelesado en la television y mostrando mi satisfaccion en voz alta."Ahí está mi Urcel.."
Y esta mañana,bajamos hasta donde nos esperaba el camion.Urcel jamas se habia subido a ningun camion o remolque,y yo no sabia como iba a reaccionar.En principio se mostró reacio,oliendo la rampa y me miraba como diciendo "Qué haces ahi? No querrás que te siga ahi dentro..¿Porqué no regresamos al box,que aun no me he desayunado.."
Yo le animaba a subir,pero el pobre no se atrevia.Veia que yo estaba alli y que queria que subiese,pero su instinto le decia que desconfiara de aquella caja tan rara y que olia tan desconocida... se empezó a poner nervioso y a escarbar y dar golpes en la rampa con sus enormes cascos.
Mi hija le tomó del ramal.Urcel obedece a mi hija como si se tratase de mí mismo,pues somos las personas con quien mas ha tratado.Yo le levanté una de sus enormes manos y se la puse en la rampa.Despues le puse la otra.Urcel empezó a temblar de nerviosismo.¡¡Pobre!! Le temblaban las piernas...Me puse a su lado y le animé con suaves palmadas en su grupa y con la voz.."Animo muchacho ¡¡¡¡.."Vamos precioso.." Venga Urcel,sube..."
Y Urcel me miró como diciendo: "Tengo mucho miedo,pero si tú me pides que suba,subiré." Y subió.Claro que subió..Me siguió al interior del camión como me seguiria al fin del mundo si yo se lo pidiese.
Una vez acomodado,vinieron los besos,las caricias,los consejos...que se portara bien,que hiciera honor a su criador y a su amigo.Porque Urcel dejaba atras,no dueños,dejaba amigos y dejaba una memoria y un recuerdo imposibles de borrar.
Un ultimo beso,una ultima caricia y me bajé del camión.La puerta se cerró y lentamente emprendió elcamino hacia Madrid y hacia su nueva vida.Una lagrima incontenible se me deslizó de los ojos,mientras le oía lanzar un ultimo relincho de despedida....
Adiós Urcel,querido amigo..Desde aquel dia en que te conocí en las montañas de Babia,supe que aquel potrillo iba a escribir una pagina especial en mi vida.Sabia que un dia u otro tendria que llegar la separación,pero jamás creí que pudiese ser tan duro separarme de ti.
Durante los siete años en que disfruté de tu amistad,jamás tuviste ni un mal gesto,ni un enfado.Siempre probaste una docilidad proverbial,de una entrega total y de una lealtad a toda prueba.Nunca estuviste enfermo,nunca me diste ningun problema,al contrario,no has hecho mas que llenar mi vida de satisfacciones de todo tipo.
Y por eso,por tu lealtad,por tu amistad y porque has sido para mí el mejor caballo del mundo,por eso quiero premiarte con el Cielo de los caballos en la Tierra.Aunque eso signifique la separa cion,aunque eso signifique un sacrificio muy grande para mí,quiero asegurarme de que seras feliz el resto de tus dias.
Ve ,Urcel,y cuentales a las gentes de Madrid,que aqui en Asturias,tambien sabemos de criar caballos y de entregar lo mejor de nosotros al beneficio comun de España.Haz honor a tu nombre y a tu criador,en la seguridad de que él,se queda orgulloso de haber criado a un caballo de tu categoria y de haberlo enviado a la Guardia Real.
Salve, Urcel...yo te saludo ¡¡¡¡¡¡¡¡¡
El dia amaneció gris y muy frio,con la nieve en las cumbres,como si quisiera acompañar con su tristeza la tristeza que me quedó a mí en el corazón.Ayer estuve toda la tarde cepillandolo para que estuviese bien bonito y despidendome de él.
Le expliqué que, como habia sido siempre un buen caballo,que como se habia hecho digno de todo el cariño del mundo,pues que la vida le habia premiado con la oportunidad de irse a una especie de Cielo que los caballos tenian en la Tierra,ya que no tenian Cielo de verdad.Y le conté que ese Cielo se llamaba la Guardia Real,y que estaba en un pueblo llamado Madrid,que era un poco mas grande que Palaciós.Que allí,ademas de disfrutar de todas las comodidades del mundo,habria otras personas que lo querrian tanto como yo,que se preocuparian de que siempre estuviese contento,de que nada turbara su sueño por la noche,que nunca le faltase la mejor comida y de que hiciese ejercicio todos los dias.Que habria personas que cepillarian a diario y que le rascarian en la cruz,que es lo que mas le gusta.
Mientras frotaba su lomo con la bruza,le contaba que le habia cabido en suerte el mayor honor a que podia aspirar un caballo,y que iba a servir a Su Majestad el Rey de España,y que seria la envidia de todos los caballos del mundo,pues la suerte no premia por igual a todos los caballos.
Urcel me miraba y me comprendia perfectamente.Le dije que alli conoceria a otros muchos caballos parecidos a él.Que le enseñarian y le entrenarian para tirar de carruajes,y que en las grandes ocasiones,desfilaria imponente y orgulloso por las calles de Madrid,y que podia estar seguro que yo estaria mirandole embelesado en la television y mostrando mi satisfaccion en voz alta."Ahí está mi Urcel.."
Y esta mañana,bajamos hasta donde nos esperaba el camion.Urcel jamas se habia subido a ningun camion o remolque,y yo no sabia como iba a reaccionar.En principio se mostró reacio,oliendo la rampa y me miraba como diciendo "Qué haces ahi? No querrás que te siga ahi dentro..¿Porqué no regresamos al box,que aun no me he desayunado.."
Yo le animaba a subir,pero el pobre no se atrevia.Veia que yo estaba alli y que queria que subiese,pero su instinto le decia que desconfiara de aquella caja tan rara y que olia tan desconocida... se empezó a poner nervioso y a escarbar y dar golpes en la rampa con sus enormes cascos.
Mi hija le tomó del ramal.Urcel obedece a mi hija como si se tratase de mí mismo,pues somos las personas con quien mas ha tratado.Yo le levanté una de sus enormes manos y se la puse en la rampa.Despues le puse la otra.Urcel empezó a temblar de nerviosismo.¡¡Pobre!! Le temblaban las piernas...Me puse a su lado y le animé con suaves palmadas en su grupa y con la voz.."Animo muchacho ¡¡¡¡.."Vamos precioso.." Venga Urcel,sube..."
Y Urcel me miró como diciendo: "Tengo mucho miedo,pero si tú me pides que suba,subiré." Y subió.Claro que subió..Me siguió al interior del camión como me seguiria al fin del mundo si yo se lo pidiese.
Una vez acomodado,vinieron los besos,las caricias,los consejos...que se portara bien,que hiciera honor a su criador y a su amigo.Porque Urcel dejaba atras,no dueños,dejaba amigos y dejaba una memoria y un recuerdo imposibles de borrar.
Un ultimo beso,una ultima caricia y me bajé del camión.La puerta se cerró y lentamente emprendió elcamino hacia Madrid y hacia su nueva vida.Una lagrima incontenible se me deslizó de los ojos,mientras le oía lanzar un ultimo relincho de despedida....
Adiós Urcel,querido amigo..Desde aquel dia en que te conocí en las montañas de Babia,supe que aquel potrillo iba a escribir una pagina especial en mi vida.Sabia que un dia u otro tendria que llegar la separación,pero jamás creí que pudiese ser tan duro separarme de ti.
Durante los siete años en que disfruté de tu amistad,jamás tuviste ni un mal gesto,ni un enfado.Siempre probaste una docilidad proverbial,de una entrega total y de una lealtad a toda prueba.Nunca estuviste enfermo,nunca me diste ningun problema,al contrario,no has hecho mas que llenar mi vida de satisfacciones de todo tipo.
Y por eso,por tu lealtad,por tu amistad y porque has sido para mí el mejor caballo del mundo,por eso quiero premiarte con el Cielo de los caballos en la Tierra.Aunque eso signifique la separa cion,aunque eso signifique un sacrificio muy grande para mí,quiero asegurarme de que seras feliz el resto de tus dias.
Ve ,Urcel,y cuentales a las gentes de Madrid,que aqui en Asturias,tambien sabemos de criar caballos y de entregar lo mejor de nosotros al beneficio comun de España.Haz honor a tu nombre y a tu criador,en la seguridad de que él,se queda orgulloso de haber criado a un caballo de tu categoria y de haberlo enviado a la Guardia Real.
Salve, Urcel...yo te saludo ¡¡¡¡¡¡¡¡¡