Sila dijo:En un país dode el grito de guerra de una afición entera es el "Yo soy español", reivindicando la condición adquirida de nacimiento, con rabia de por fin poder decirlo, al haber sido tabú durante muychos años, en el que enseñar una bandera con nuestros colores suponía ser tachado de fascista, en el que nuestro país no se llama España, sino "este país"; un grupo de muchachos que no tienen idea de política y algunos no han leido más de un libro en su vida, han removido las aguas para poner nuestros simbolos en su sitio, con el simple uso de una pelota. Pero por desgracia el fondo sigue inamovible, y así seguirá con el esnobismo de los que mandan, aquellos que en el siglo XVIII despreciaron una monta infinitamente mejor que la francesa y genuinamente española, la jineta; para adoptar la moda europea, causa de la actual situación hípica española en que para sacarse los galopes te exigen montar como lo haría cualquier europeo menos un español. Da pena ver como la riqueza cultural se va perdiendo a favor de lo extranjero. Ahora nos lleganademás con la doma western, que es una vaquera de peor calidad y mal copiada, con el único mértio de publicitarse bien porque viene de fuera, sin llegar a la ínfima parte de técnica de la nuestra. Es un país con uno de los mejores idiomas del mundo y contínuamente nuestra mente paleta y cateta se empeña en meter anglicismos que empobrecen nuestro idioma, que ya poseía seguro más denua palabra para definir eso que queremos. Y seguimos viendo que tenemos que salir a la calle para gritar soy español, sin miedo, porquelo somos, nos guste o no. Y ahora prontoi nos dará miedo decir hago vaquera. Pues la hago, y desafío a cualquiera que intente superar en clásica el equilibrio y técnica, así como sumisión de mis animales. En España siempre se montó a caballo de otra manera, y cuando defedíamos lo nuestro, eran los demás quienes venían a copiarnos. De hecho nuestro caballo se creó para nuestra doma, y actualmente tiran de él hacia esa otra doma extranjera más fea y pesada, haciéndo que el caballo español sea una vulgar sombra de lo que fue en su orígen y muchísimo peor en líenas generalñes que su hermano el lusitano.
No me da vergüenza decirlo, me gusta la vaquera, el flamenco, los toros, el carnaval gaditano, el andaluz hablado y el español escrito, prefiero mil veces las playas de Huelva a las de MIami o Punta Cana, no me cambio por ningún holandés o aleman por muy ricos que sean o monten bien a caballo. Quiero calles blancas y no con rascacielos, no quiero cerveza alemana, la nuestra es roja también y sabe mejor y más fría, Las canciones son más bonitas en mi idioma porque las entiendo. Yo soy español, y mi color es el rojo, omo siempre, y mi montura la vaquera, sin duda alguna.
Muy certero el comentario, Elena... esos son valores muy difíciles de encontrar hoy en día.elena-amazona dijo:no esperemos ni idealismo ni lógica
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