Hola, y gracias por la explicación, pero por desgracias ese método ya lo tengo aplicado…
Desde un inicio le digo no y con la cuerda en tensión para que se sienta cogido y controlado, de hecho, voy hablándolo, para que se concentre en mi voz y para tranquilizarme a mí misma, pero mi corazón por dentro va a 100, este caballo es como una bomba de mecha corta y cuando se le acaba la mecha, aunque le vaya marcado, pega el tirón y adiós, de hecho, tuve una tendinitis, y ahora me tengo que operar de una muñeca por una fisura en un cartílago de la misma, por aguantar algún que otro tirón. En cambio, mi marido es capaz de llevarlo (marcándolo y corrigiéndolo). Yo creo que el problema es que es consciente de que yo no puedo con él a la hora de llevarlo y se aprovecha
… en cierto modo lo de la cabezada con serreta no me parece en cierto modo una buena idea porque también puede llegar a ser peligrosa en el caso de que me escapara con ella puesta, se pisara el remal y se partiera el hueso de la nariz… (así que valorando pros y contras la desecho de mis opciones)… y luego he estado viendo también y hay un tipo de embocadura (la chifney) pero no tengo experiencia propia con ello, sí que la vi utilizarse pie a tierra con un potro con problemas que pasaba por encima de las personas sin ningún problema (se tiraba encima, yo pensaba que era un caballo traumatizado). A simple vista parece muy brusca “y rara” y no me convence. Por qué a la hora de sacarle todo para dejarlo en el prado, puede ser un poco aparatoso…
AHORA MISMO YA NO SE QUE PUEDO HACER PARA QUE APRENDA QUE CONMIGO NI CON NADIE SE DEBE PEGAR EL TIRON…