Hola asterix!
Bueno, te cuento mi opinión y experiencia personal.
He montado unos cuantos frisones y he domado uno de ellos (un potro de tres años).
Si, son ligeros, porque cuando están en marcha se mueven sin que tengas que estar todo el rato empujando, y son muy agradables, pero, los que me he encontrado tenian en común que eran un pelín tozudos, pero se les ha ido pasando a medida que han ido confiando y aprendiendo cosas.
Son unos caballos que se entregan por completo sin les demuestras que hay que ser valiente, que no hay que asustarse ante todo lo que se mueve (son muy bebes, maduran tarde psicologicamente), lo bueno es que una vez aprenden algo lo aprenden para siempre.
Y son muuuy tranquilos, calmados, un paso fenomenal y un galope cómodo, aunque con el trote, no pasan los pies (hasta que les enseñas), van trotando a saltitos y es algo incómodo (les cuesta pisarse la huella y mucha mas pasarla en el trote largo, pero llegan a aprender).
Los he montado con filete partido y sin espuelas, por loq ue puedo decirte que no es un caballo pesado (que se cuelgue en la embocadura) y es sensible aunque de reacciones lentan.
Saludos!