Aquí la tenemos. NO olvidéis que es la portada de la Revista A la vaquera, que no se por qué el escáner me ha cortado las letras y no quiero tener problemas de derechos de autor.
Bien, para empezar a analizar la foto me baso en lo primero que debe tener un caballo domado: la relajación, entendiendo ésta como física y mental. ¿La tiene Babieca? Rotundamente no. ¿Dónde veo eso? Pues bien veo que en la media vuelta que se ve en la foto no hay bajada de caderas, de hecho la flexión de los posteriores apenas existe y se ve claramente que la grupa está "más alta" que el dorso, lo cual va en contra de la bajada de caderas consecuencia de una flexión de posteriores, a su vez consecuencia de un entrenamiento sistemático para flexionar la articulación de la cadera y el corvejón. No sólo eso, sino que la cruz, al contrario que el dorso, está más alta que la grupa y, ¿cómo ha hecho eso el caballo? Pues hundiendo su dorso, lo cual podemos verlo muy bien gracias a la costumbre (errónea a mi modesto entender) de poner la montura tan adelantada.
Por delante vemos un caballo recogido, o colocado, pero forzado a ello, buscando la instalación en esa postura. Señales de esto: el labio superior en tensión ya muestra una gran pista de ello, pero lo que hace saltar la liebre es la garganta musculada en demasía. Eso no es consecuencia de la naturaleza del caballo, sino del entrenamiento que bloiquea la nuca, como pasa en la foto. Y ¿dónde está la causa de esa rigidez en toda la línea superior? Pues en gran parte, aunque no todo, en la mano durísima que se muestra (con dos dedos en las riendas en vez de uno) dejando casi ninguna opción al animal para que relaje su dorso y su cuello y nuca. Por todo esto tenemos un caballo con la zona lumbar, la zona dorsal, la zona cervical, la nuca y la mandíbula rígidas; lo cual es una muestra de la no aceptación de las ayudas.
De hecho, vemos que el caballo no flexiona en la media, lo cual seguro que con toda esa tensión, es imposible. Peor el jinete no lo ayuda pues además de la mano dura, vemos que los hombros no están alineados co los del caballo, habiendo girado el jinete antes que él; y las caderas, a pesar de que parece que sí están alineadas con las de su montura, no muestran su eficacia dado el mínimo remetimiento del animal, quizás por el leve asiento dle jinete.
Lo dicho, mejor con otra foto en la portada.