Un día puse una explicación de algunos tipos de cólicos. Cada uno da unos signos diferentes.
Lo vuelvo a copiar:
Normalmente los signos que da el caballo es falta de apetito, que se mire el vientre, que patee, que se revuelque... Normalmente cuando se revuelca es que el dolor se da en espasmos agudos y fuertes. Si el dolor es leve y constante se tiende a quedar tumbado de costado o sobre el dorso de forma casi inmóvil (esto a primera vista siempre me ha asustado más...). También, a causa del dolor, es normal ver al caballo sudoroso, o si ya llevo rato así, empapado de sudor.
Para hacer un examen mejor se debe tomar el pulso, ver el relleno capilar y hacer un examen rectal. Está claro que esto debe hacerlo un veterinario.
El tipo de cólico más normal es el espasmódico, donde se puede observar un dolor que viene y se va, y vuelve a venir. El caballo está con dolores durante 30min más o menos... y está causado por una perturbación del sistema nervioso en el intestino, es decir, hay una motilidad anormal en el intestino. Lo que debe quedar claro es que hacer andar al caballo no es un tratamiento para el cólico, es una forma para distraerlo con el fin que no se revuelque. Y los vets aconsejan no andarlo durante mucho rato, pues puede cansar al caballo y durante el cólico, es normal que la circulación ya está de por si mal. Como tratamiento se suelen dar antiespasmódicos (normalmente mezclas de hioscina y dipirona, que ayudan a recuperar el movimiento normal de los intestinos.
El otro tipo de cólico bastante común es el producido por grandes cantidades de gas en el intestino. Es necesario hacer desaparecer el gas, y a veces se precisa cirugía.
También hay la impactación, que es cuando los contenidos del intestino dejan de desplazarse. Normalmente ocurre en el colon largo, en el punto en el que hace un brusco giro de 180º. El tratamiento acostumbra a ser parafina líquida en gran cantidad de una sola vez. Esto no quita que sea necesaria la extracción quirúrgica. Si esto se coge desde el primer momento, las porbabilidades de necesitar operación disminuyen mucho. Lo que se ve en estos caballos es una apatía general, dejan de comer, no les apetece moverse, se tumban mucho más de lo normal, están más sosos, etc. Y en este caso, el caballo sigue defecando unos días después de que se haya producido el tapón, así que aunque se vean excrementos no hay que descartarlo.