Respondiéndote a temas legales,
1º. Para que la actual poseedora del mismo recuperase el dinero dado tendría que ir a un abogado e ir a juicio. Sólo así recuperaría el dinero (si es que el que se lo vendió tiene bienes con los que indemnizarla, cosa que en los tiempos que corren puede ser muy difícil).
2º. Aunque en el registro aparezca tu nombre, si no he entendido mal, los papeles de titularidad los tiene otra persona (el primer poseedor) ergo, llegado un juicio, ese poseedor, tachán, ¡¡sería el propietario del caballo!! Que la titularidad aparezca a otro nombre en un registro no significa que el caballo sea de tal titular. Un registro es un título formal, el caballo es de quien tiene los papeles del mismo (el título de pertenencia o título material). Por ahí comentaban que el contrato verbal no tiene validez. Y sí la tiene en nuestro derecho. Otra cosa es que sea difícil de probar, pero en este caso no es nada difícil, porque, repito: el primer poseedor tiene los títulos del animal.
3º. No deberías habérselo cedido al primer poseedor sin un contrato de comodato u otro de similar naturaleza. Es un contrato muy sencillo que a) te hubiera permitido recuperarlo en el momento que quisieras. b) te habría ''eximido'' de una eventual responsabilidad. Y lo pongo entre comillas porque eso es muy matizable.
4º. Cabe la posibilidad que la actual poseedora adquiera en propiedad el caballo, si sostiene su posesión durante 3 años seguidos sin que nadie se lo reclame y ella cree que lo adquirió de quien era el dueño (cosa que parece así). En todo caso, aún habiendo mala fe por su parte, lo adquiriría a los 6 años de comenzar a poseerlo. Para acreditar esta propiedad, transcurridos los plazos que señala el código civil, sería necesario que presentara una acción en el juzgado para que se declarase tal propiedad y ella se quedara tranquila.
Todo esto lo digo a salto de mata y sin estudiar el caso a fondo.
Saludos.
PS: Leo por ahí que habláis de una veterinaria dispuesta a sacar unos nuevos papeles al caballo con un cambio de microchip. Llegado un juicio, si el primer poseedor que tiene la documentación del caballo quisiera discutir la propiedad podría hacerlo y quedarse con el animal. Parece difícil que esto ocurra ya que se desprendió de él, pero podría hacerlo y demostrar que sus títulos son anteriores a los nuevos que quiere ''sacar'' la veterinaria, lo que, a todas luces es, como diría un amigo mío, un chanchullo.